Deje de alardear que pasa noches sin dormir y que trabaja horarios de 24 horas. El secreto de un trabajo importante, productivo y creativo es un buen descanso nocturno, afirma Matt Burgess
En la cima del mundo empresarial, está de moda no dormir y presumir por trabajar más de 100 horas a la semana. El director ejecutivo de Tesla y SpaceX, Elon Musk, afirma que hay veces en las que no ha podido dejar su fábrica “por tres o cuatro días"; la exdirectora ejecutiva de Yahoo! Marissa Mayer dice que puede trabajar una semana, 130 horas, solo durmiendo cuatro horas por noche, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirma dormir de tres a cuatro horas por noche; y el jefe de Disney, Bob Iger, aparentemente se despierta a las 4:30 a. m. para comenzar su día.
En Reino Unido, el consejo nacional, Sleep Council, reveló que una persona promedio va a la cama a las 23:15 h, y duerme seis horas con 35 minutos por noche(1). (El consejo recomienda a los adultos dormir entre seis y nueve horas por noche).
“Nadie puede funcionar plenamente [sin las horas de sueño suficientes]”, afirma Neil Stanley, autor de How to Sleep Well y experto en sueño, quien ha investigado este tema durante 36 años. “Fundamentalmente, si permanece despierto 17 horas al día, estará tan incapacitado para trabajar como si estuviera por encima del límite de alcohol permitido para manejar. El sueño influye en cada aspecto de su salud”.
Stanley no es el único que advierte sobre el impacto negativo que puede tener el no dormir. No dormir de manera consistente hace que el cuerpo se agote. El Servicio Nacional de Salud (NHS) de Reino Unido afirma que la falta de sueño de manera constante puede poner a las personas en un alto riesgo de obesidad, enfermedades del corazón y diabetes, sin mencionar el impacto mental de la fatiga, el mal temperamento y la falta de concentración.
La US National Sleep Foundation afirma que el hecho de que una persona duerma es tan importante como llevar una dieta sana y hacer ejercicio. Su encuesta anual reveló que solo el 10 por ciento de las personas le dan importancia al sueño más que a otras partes de su rutina diaria, incluso cuando saben que la calidad del sueño hará que el día siguiente sea aún más fácil(2).
El precio de no dormir
Puede negarlo, pero el mal sueño cuesta dinero. El grupo político sin fines de lucro Rand Corporation calculó que Estados Unidos pierde alrededor de $411 mil millones al año debido a problemas relacionados con la falta de sueño. (Japón pierde más de $138 mil millones al año, Alemania $60 mil millones y Reino Unido $50 mil millones)(3). Un informe publicado en 2016 analizó el impacto del sueño en la economía y concluyó que la falta de este causó bajas en la productividad y tuvo como resultado más de un millón de permisos de ausencia por enfermedad en Estados Unidos.
“La parte del cerebro que es importante en todo esto es la corteza prefrontal”, comenta Stanley. “Esta es una de las últimas partes del cerebro que se desarrolla. Es la parte que se encarga de hacer las cosas inteligentes que lo convierten en humano: planear, conciencia sobre el futuro”. Como resultado, el experto en sueño explica, si alguien es privado del sueño no podrá concentrarse igual de bien en las tareas que si hubiera descansado adecuadamente.
Además, hay otros impactos más sutiles. “Sabemos que las personas que no duermen bien son más deshonestas”, afirma Stanley. “Se vuelve menos capaz de leer las emociones de la gente. Malinterpreta el lenguaje o el tono de voz”. El informe de Rand llega a la conclusión de que hay beneficios para las empresas si sus empleados duermen más tiempo. Afirma lo siguiente: “Si los individuos que duermen menos de seis horas empezaran a dormir seis o siete horas, esto podría agregar $226.4 mil millones a la economía estadounidense”.
Se dice que Elon Musk, director ejecutivo de Tesla y SpaceX, necesita dormir un poco
Como resultado, algunas empresas y gobiernos han tratado de que el habito del sueño se tome más enserio. Google ha instalado cápsulas de siesta en algunas de sus oficinas, mientras que las oficinas principales de Nike en Estados Unidos tienen habitaciones en las que el personal puede dormir o relajarse. Stanley opina que es responsabilidad de empleadores y empleados asegurarse de que las personas no se sientan tan cansadas en el trabajo. Si alguien está demasiado cansado, es posible que su vida personal o profesional esté entorpeciendo su sueño. "¿Por qué su personal tiene sueño durante el día? ¿Están trabajando demasiado? ¿Se van a casa para ver una serie completa en casa hasta mitad de la noche?"
En otros lugares, Francia aprobó la ley del ‘derecho a desconectarse’, que establece que las empresas con más de 50 empleados deben establecer protocolos para dejar de trabajar los fines de semana y después de terminar sus turnos diarios. Entre algunas sugerencias se incluye dejar de enviar correos electrónicos del trabajo después de las horas laborales normales. El informe de Rand recomienda que los empleadores “diseñen y construyan espacios de trabajo más iluminados; combatan los riesgos psicológicos en el lugar de trabajo; y disuadan el uso excesivo de los dispositivos electrónicos”.
Descansar con tranquilidad
En la actualidad, existen más formas en las que se puede dar seguimiento y monitorear nuestras horas de sueño. La tecnología ha invadido las habitaciones, con más distracciones disponibles pero también herramientas potencialmente útiles. Los relojes inteligentes incluyen monitores de ritmo cardíaco de muñeca, que pueden decir cuándo tiene sueño el usuario, determinar qué tanto tiempo ha dormido cada noche y determinar la calidad de su sueño dependiendo de qué tan agotada esté la persona.
Sin embargo, los relojes inteligentes son la punta del iceberg. En un informe de McKinsey realizado en 2017(4) se estimó que la industria de la salud del sueño tenía un valor cercano a los $30 o 40 mil millones, con un crecimiento del 8 por ciento al año. Hay aplicaciones que reproducen música para ayudarle a dormir, colchonetas con sensores que puede colocar debajo de sus sábanas, luces que replican la luz del sol, diademas que monitorean la actividad del cerebro, pijamas hechas con un material que regula el calor e incluso un robot que lo abraza para ayudarle a dormir. El jurado no sabe si alguno de estos métodos de verdad funciona, pero al menos los consumidores pueden acceder a más información sobre sus patrones de sueño y comportamiento.
Stanley afirma que existen tres elementos cruciales para dormir bien durante la noche. ¿El primero? “Una habitación que induzca el sueño: una que sea oscura, tranquila, fresca, cómoda y que esté bien ventilada”, comenta. “La segunda es estar en el entorno correcto; el cuerpo necesita poder relajarse. Esta es la razón por la que las personas no duermen inmediatamente después de acostarse en su cama, ya que el cuerpo necesita relajarse primero”.
Finalmente, lo más importante es tener la mente despejada. “No puede dormirse si su mente está trabajando o si está preocupado", afirma Stanley. El cerebro no está preparado para dormir si se la ha pasado respondiendo correos desde su cama. “Necesita hacer a un lado sus preocupaciones diarias y tranquilizar su mente”.
Matt Burgess es un periodista y escritor galardonado británico que trabaja para la revista Wired en Reino Unido
Fuentes:
(1) https://www.sleepcouncil.org.uk/wp-content/uploads/2013/02/The-Great-British-Bedtime-Report.pdf
(2) https://sleepfoundation.org/media-center/press-release/2018-sleep-in-america-poll-shows
(3) https://www.rand.org/news/press/2016/11/30.html
(4) https://www.mckinsey.com/industries/private-equity-and-principal-investors/our-insights/investing-in-the-growing-sleep-health-economy
